Los celestes esperan como agua de mayo la subasta de finales de este mes
PABLO LAYNEZ / DIARIO DE ALMERÍA
El Poli Ejido tiene un ojo en el campo de fútbol y otro en los despachos. Su futuro pasa por la subasta de finales de este, momento en el que los dirigentes del club celeste confían en que entre capital para afrontar lo que resta de temporada. De hecho, la planificación de principio de campaña marcaba en rojo este día en el calendario porque saben que de él depende buena parte, sino toda, de la supervivencia del club.
Todavía no hay fecha oficial para la subasta. Todo depende de la administración concursal, pero lo que sí que es seguro es que tendrá que ser a finales de este mes, antes de que acabe el presente año 2011. La subasta debe de ser comunicada y publicada en el Boletín Oficial y, veinte días después, se llevará a cabo en una notaría, bien de Almería capital, bien de El Ejido. En principio, aunque no hay nada hecho todavía de manera oficial, se tantea el día 22 de diciembre, jueves, como propicio.
La junta directiva espera que algún grupo inversor se haga con las riendas del club y limpie toda la deuda que el Club Polideportivo Ejido SAD arrastra. Aunque en el municipio se escuchan cantos de sirena de que hay gente que quiere tomar las riendas del proyecto, todos son rumores y hasta el día de la subasta el tema se tiene entre alfileres.
Lo único que está claro es que la subasta, si todo sale como se espera, es la única vía de escape del equipo. El Poli Ejido cumplió su último partido con el árbitro y volverá a hacer lo propio este fin de semana ante el Melilla, para evitar ser expulsado de la competición. Los celestes están aguantando estoicamente para que el equipo continúe en Segunda B y así poner una nueva base desde la categoría del bronce al nuevo proyecto que comenzase el dueño del club ejidense.
El proceso de venta del club es muy diferente al de disolución o de fusión. Por lo tanto, el Poli Ejido seguirá siendo la misma institución, tendrá la misma denominación y su ficha federativa no cambiará. El club se quedará limpio de deudas si hay un nuevo comprador y, a partir de la entrada de dinero, se pondrán emprender fichajes, parcela que ahora mismo está parada por la administración concursal.
Entre el campo y los despachos
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