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sábado, 11 de junio de 2011

La plantilla celeste de la campaña 09-10, también tendrá voz y voto

El Polideportivo Ejido no solamente debería entablar negociaciones con los jugadores de este año, sino además con los del pasado
JAVIER NAVARRO | EL EJIDO. Ideal.es


Cañadas en la temporada 08/09

Se acerca el día en el que el Polideportivo Ejido tiene que tener cerrado todo lo concerniente a la deuda por la que puede perder su plaza en Segunda B e incluso, llegado el caso, hasta desaparecer como entidad, por lo que el 30 de junio se antoja como el día más importante de su historia más reciente y quizás de sus 42 años y tres meses de vida.
Los más de 300.000 euros que tiene que reunir el club en menos de tres semanas hacen que sea bastante complicado el que el Poli deje a cero el débito, por lo que parece que la permanencia o la supervivencia suya va a pasar por entablar negociaciones con una plantilla, a la que se le deben varias mensualidades.
Desde febrero, los futbolistas se encontrarían sin haber recibido ninguna cantidad correspondiente a sus nóminas, de modo que las negociaciones se prevén duras, pero el club confía en que se llegue a un nuevo entendimiento entre él y la plantilla, siendo el trabajo del director deportivo Marcos Lema y el del asesor jurídico Enrique Ibáñez fundamentales.
Mirando al pasado
De esta manera, la entidad ejidense tiene que lograr aplazar el pago de lo que deje a deber todavía, pero no sólo al equipo que ha competido este año sino también al que lo hizo el anterior ejercicio 2009/2010, en el que a pesar de los graves problemas económicos del club el Poli estuvo luchando por el ascenso a Segunda División.
Es por ello que los componentes de aquel grupo que terminó haciendo soñar a la afición, tienen una parte de la llave de la salvación -o no- del Polideportivo Ejido y como alguien dijo una vez 'el fútbol es un estado de ánimo', así que podría depender de cómo están los ánimos en cada uno de los miembros de aquella plantilla, un año después de dejar de enfundarse la camiseta celeste.
Algunos de ellos aún están compitiendo, mientras que la mayoría se halla de vacaciones y en esta temporada los ex jugadores más recientes del Poli -con permiso de Javi Ruiz, José Rodríguez, Martín Vaquero y Manolo Pérez- han vivido situaciones de todo tipo, como ascensos, descensos, buenas actuaciones coperas o el paso de una campaña sin pena sin gloria.
¿Cómo les ha ido?
Quienes más motivos para sonreír tienen son Cañadas y Luciano, puesto que han conseguido con el Real Murcia lo que no pudieron con el conjunto celeste, como es ascender a Segunda y, además, tuvieron la oportunidad de hacer un buen papel en la Copa del Rey, llegando a dieciseisavos de final, donde los pimentoneros no se lo pusieron demasiado fácil al Real Madrid.
Quizás, David Valle también pueda celebrar el ascenso a la LFP, pues juega en un Badalona que contra el Mirandés está jugando la segunda eliminatoria del play off tras dejar fuera a las primeras de cambio al Leganés de Fede Azkárate y Nakor.
Raúl Pichardo comenzó la campaña en el Guijuelo -Grupo II-, pero se marchó una categoría más abajo, para terminar ascendiendo con el Toledo a Segunda B; en cambio, más amargo ha sido el año para Arbilla, quien ha descendido con el Salamanca a Segunda B, mientras Raúl Gaitán y Adrián Cruz lo han hecho a Tercera, con el Estepona y el Pontevedra respectivamente.
La cosa no ha ido 'ni fu ni fa' para Juan López y Víctor Armero en Écija, para Antoñito y Roberto en el Almería B, para Gregory en la UD Logroñés -con Raúl Torres-, para Marc Castells en el Real Oviedo y para Manolín en el Córdoba B.
Por último, Juanma empezó en el Alhaurino de Tercera y ha acabado en el Fuengirola-Los Boliches de Primera Andaluza y Raúl Sánchez ha disfrutado de su retirada.

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