El Polideportivo Ejido quiere esperar a la confirmación de los grupos

El club quiere aguardar a que se haga oficial el borrador difundido antes de comenzar a cerrar acuerdos para fichar jugadores

JAVIER NAVARRO | IDEAL
El Polideportivo Ejido no ha comenzado aún a cerrar las negociaciones para la confección de la plantilla con la que afrontará la próxima temporada. La dilatoria concedida por la Federación Española en la confección del calendario, ya que no se ha completado todavía el cupo previsto de 80 equipos para Segunda B (hay sólo 78) hace que la entidad del Poniente almeriense se mantenga en 'compás de espera'.
La Federación concedió diez días a los clubes para esperar a que algún militante de Tercera División esté dispuesto a cubrir la tasa solicitada, de 395.000 euros, para acceder a la Segunda B, y ése es el plazo que se ha concedido a sí mismo el Polideportivo Ejido para comenzar a cerrar las contrataciones, de las que la primera será el entrenador, antes de iniciar los fichajes para completar la plantilla.
La nota difundida por la Comisión, en la que figuran los cuatro grupos de Segunda División B, con los equipos que los constituyen, entre los que se halla el conjunto celeste, es sólo un borrador, que tiene que ser oficializado por la Federación Española. El Poli aguarda ese paso para verificar su continuidad en la categoría, antes de iniciar las demás actuaciones.
De este modo, aunque su director deportivo, Marcos Lema, ha 'peinado' el mercado para seguir a todos los jugadores que pueden interesar al club, no ha cerrado ninguna negociación, puesto que no ha recibido aún el visto bueno del club, que desea antes la confirmación de su continuidad en Segunda B, para después, buscar un técnico y una nueva plantilla, ya que en estos momentos, sólo tiene a cuatro hombres con contrato, Valerio, Katxorro, Chema y Moreno.
Presupuesto
El director deportivo celeste tampoco tiene, aún, conocimiento del presupuesto del que dispondrá para confeccionar la plantilla de la próxima temporada, aunque las perspectivas apuntan a que se reducirá notablemente con respecto al de la pasada campaña, tras los apuros económicos padecidos en las dos últimas. Es posible que Lema cuente con el 50% de los fondos de los que dispuso su antecesor en el cargo, Kike Burgos, en 2010.
El año pasado, los cálculos realizados para confeccionar el presupuesto fueron erróneos y, finalmente, quedó una deuda que, en el caso de la que se contrajo con los jugadores, ha puesto en peligro la continuidad del equipo en la categoría. Por tanto, el Consejo de Administración quiere precisar mucho más en el diseño de la liga 2011/12, para evitar que se repitan los problemas económicos de las dos últimas campañas y la plantilla pueda concluir la competición con deudas y el club, con grandes dificultades para reunir los fondos suficientes para solventarlas.
Este año, el Polideportivo Ejido se ha convertido en una excepción a la regla, en un caso a estudiar cuyo desenlace, probablemente, va a dar lugar a que se cambien algunas normas y, quizá, incluso a que se promulguen leyes, ya que ha dejado sin contenido al espíritu de una norma, la del artículo 192.2 b), que pretende defender el derecho de los jugadores, como trabajadores, a percibir sus emolumentos, penalizando a los clubes que mantengan deudas con ellos a la pérdida de la categoría. Sin embargo, la especial situación en la que se halla la entidad del Poniente almeriense ha provocado que, pese a que tiene deudas con su plantilla, que no han podido ser satisfechas, el conjunto no halla descendido, por lo que las instituciones están estudiando los cambios legales pertinentes que, no obstante, ya no afectarán a la situación del Poli, ante la irretroactividad de las leyes en España.
Negociación
Otro de los pasos que quiere dar el club es negociar con los cuatro hombres que tienen aún contrato en vigor. La entidad cree que esta situación hipoteca la formación de la nueva plantilla, ya que recorta las posibilidades de su director deportivo, por lo que puede tratar de conversar con ellos para abrirles la puerta de cara a una posible marcha, si reciben alguna oferta interesante, o tratar sus actuales condiciones. No obstante, esta medida puede encontrar la negativa de los jugadores, que han recordado, a lo largo de estos últimos días, que ya mostraron su buena voluntad la pasada campaña y aceptaron renegociar sus contratos por lo que pueden negarse a realizar nuevos cambios.
Finalmente, en la entidad se aguarda también la reacción de la Asociación de Futbolistas, AFE, con respecto a la decisión de la inclusión del equipo en el borrador de los cuatro grupos de Segunda B, ya que, si se oficializa, podría presentar algún recurso contra la decisión institucional.