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domingo, 18 de septiembre de 2011

Es obligatorio puntuar ante el Caravaca

La defensa del Poli Ejido, conjurando una situación de peligro en las inmediaciones del área

JAVIER NAVARRO | ALMERÍA. IDEAL

El Poli Ejido necesita un resultado positivo en la cancha de un rival directo que aún no ha vencido
El Poli Ejido viaja a tierras murcianas para disputar esta tarde ante el Caravaca un encuentro trascendental. El técnico celeste, Raúl Procopio, comenta que «todos los partidos son importantes», pero también precisa que éste se disputa ante un adversario directo, por lo que «sería importante conseguir un resultado positivo, porque descolgaríamos a un rival directo en la tabla y comenzaríamos a puntuar lejos de casa, que también es muy importante para nosotros».
El técnico celeste no podrá contar, finalmente, con los dos jugadores que han tenido problemas físicos esta semana. Fran Cortés y Fran Amado no han llegado a tiempo en sus procesos de recuperación y no estarán disponibles. Su ausencia será un contratiempo para Procopio, que pensaba dar entrada a Cortés por Amado en el once, cediendo al segundo delantero por un media punta más centrocampista, que ayude a su equipo en el control del juego.

La estrategia
Procopio advierte también sobre el principal peligro que tiene el adversario, al que ha estudiado, entre otros, en su partido ante el Roquetas del pasado domingo. Comenta que el rival se desenvuelve especialmente bien «en las jugadas de estrategia, a balón parado. Al Roquetas le remataron todas, aunque no marcaron. Hay que estar muy pendientes de las jugadas a balón parado y de las segundas jugadas, en las que nos van a crear peligro», manifiesta.
El entrenador del Poli igualmente comenta que su equipo ha trabajado concienzudamente la concentración defensiva «en los últimos cinco o diez minutos de cada tiempo», en los que ha perdido ya varios puntos, tal y como sucedió ante el Puertollano, «que va a ser uno de los que estarán entre los cuatro primeros al final, porque tiene mucha calidad de medio campo hacia arriba». Procopio también ha buscado un campo con césped artificial «y muy pequeño, como el de ellos, que no deja tampoco muchas opciones».
Los celestes quieren puntuar en tierras murcianas para retornar a la zona media de la tabla, en la que se encontraban antes de caer derrotados la pasada jornada en su visita al Puertollano. Para conseguirlo, han preparado muy seriamente el choque. Tal y como ha comentado el técnico, el duelo tiene especiales connotaciones, ante las particulares características del rival y la cancha.
La fortaleza física y elevada estatura del adversario han sido tenidas en cuenta por el entrenador celeste en su trabajo semanal para precisar con sus jugadores la forma de defender los balones aéreos que llegarán en las jugadas de estrategia, en faltas cercanas o saques de esquina, aspecto en el que el Poli falló en Lorca.
Las pequeñas dimensiones de la cancha también han tenido un papel especial en el trabajo ejidense, ya que este factor facilita la presión del defensor y dificulta la creación del juego de ataque del equipo que quiera marcar el ritmo. También crea problemas para abrir el juego ofensivo y tratar de crear espacios en las zagas, por lo que adquiere mayor dimensión la utilización de las acciones a balón parado.

La velocidad
No obstante, Procopio no ha renunciado a un planteamiento más amplio, más ambicioso. El técnico ha estudiado a fondo las características del rival y ha descubierto que sus zagueros, especialmente los laterales, suelen incorporarse al ataque, por lo que crean los espacios que las dimensiones de la cancha niegan.
Además, la cualidad más destacada de los centrales del conjunto murciano no es su rapidez, por lo que el Poli puede tratar de buscar espacios en su espalda con la velocidad de sus carrileros y de sus hombres de vanguardia, tal y como hizo el delantero del Roquetas Edu Silva en, al menos, dos ocasiones, en el encuentro en el que los roqueteros vencieron al Caravaca la pasada semana, en el que fue agarrado cuando iba a plantarse en solitario frente al arquero adversario, acción que se convirtió en el penalti que decidió el partido, y pudo, después, repetir la acción y disputar un mano a mano frente a Emilio del que salió vencedor éste.
Ante las dimensiones del campo, los dos equipos pueden optar por fútbol directo, para eludir la presión defensiva del rival, buscando segundas jugadas, otro aspecto en el que ha realizado especial énfasis Procopio en el trabajo de esta semana, en la defensa de estas acciones, y también en su utilización en ataque, ya que cree que pueden ser, junto a la estrategia, decisivas.
También puede ser muy importante para los ejidenses adelantarse en el marcador, teniendo en cuenta que los murcianos aún no han inaugurado su casillero en las cuatro jornadas disputadas.
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